“Ni soy bonita, ni te he pedido que me lo digas” es la frase que dicen todas las ilustraciones de esta artista vasca. Después de pasar de la pintura tradicional a la ilustración digital casi por accidente, Garazi ha encontrado la forma de expresar sus inquietudes a través de sus retratos, en su mayoría mujeres. Todas sus chicas están enfadadas, y con razón. Deja para la imaginación del espectador los motivos a modo de reflexión.